Comida tailandesa en Ají 555

Si hablamos de comida asiática, al limeño lo primero que se le viene a la mente es Chifa (comida china), seguido de makis (comida japonesa) y finalmente se acuerda que también pueden encontrar comida koreana, pero lo que no sabe que la variedad de comida asiática que puede encontrar es tan variada que va desde comida árabe (sí, esta también es comida asiática), comida de vietnam y comida tailandesa. En esta oportunidad me voy a centrar en este último y es que, la semana pasada tuve la oportunidad de poder visitar uno que ofrece comida típica de Tailandia, sin ir mucho por la fusión como en otro restaurante tailandés que fui hace un tiempo atrás.

El restaurante lleva por nombre Ají 555 y está ubicado en
Av San Luis 2879, San Borja (cuando los visité, estaban en Villa María del Triunfo), cerca a la comisaría del mismo distrito.

Mi papá fue quien sugirió ir a este lugar. Creo que tal vez le llamó la atención por que nunca ha probado comida tailandesa, y/o porque con mi hermano siempre hablamos de una amiga que tenemos en común que es de allá. Cualquiera sea el motivo, me pareció super buena y estaba ansiosa a que llegue el día de la visita.

El día tan ansiado llegó. Para empezar, este restaurante SOLO acepta visitas que hayan hecho una reserva previa (el teléfono lo pondrán encontrar en su fanpage). Mi papá felizmente llamó antes al lugar (como 2 días antes) e hizo la reserva así que no tuvimos ningún problema.

Al traernos la carta, todos teníamos dudas ya que no estamos acostumbrado a los nombres de los platos. Traté conseguir ayuda por parte de mi amiga, pero en ese momento no me pudo responder, así que con ayuda del mozo (que por cierto es el dueño) logramos hacer nuestro pedido. Lo ordenado fue: de entrada para picar Peek Gai Tod (alita frita) y Som Tam (ensalada de papaya verde, picante). De plato de fondo: Kao Pad Tom Yam de pollo* (arroz frito, tipo chaufa), Kao Pad Ají 555 (que es el plato de la casa, arroz salteado con chorizos, ají asado y albahaca acompañado de huevo frito), Pad Thai (fideo de arroz con huevo, salsa de tamarindo, frejol chino y maní), Gai Yang (muslo de pollo a la parrilla con salsa jiew) y mi papá pidió para él Jok Kao Oat con pollo* que es un caldo de hojuelas de avena con sabor a ajo frito y kion. Para beber, pedimos 2 jarras de Té Tailandés con Leche y 1 jarra de Limonada con Hierba Buena.

*Especifico que es con pollo porque el restaurante te da la opción de elegir si el acompañamiento del plato es pollo, carne/chancho, langostino/pulpo/calamar. Encontrarán todo el detalle líneas abajo.

El mozo antes de retirarse nos consultó si era todo lo que íbamos a pedir, en ese lapso nuestra amiga de Tailandia nos respondió a nuestras consultas (le mandamos la lista que habíamos pedido, nos dijo que estaba bien los nombres y la orden) y nos dijo que además pidiéramos una porción de arroz glutinoso, así que eso hicimos. Una vez terminado de ordenar, el señor nos dijo que se cerraba la orden y que ya no podíamos ordenar más cosas. Esto se debe a que él es el único que atiende a todas las 9 mesas una vez que se llena el restaurante, y sí que se llena. Lo comprendimos y esperamos a que llegara nuestra orden. Hay que recordar que la comida tailandesa es picante por naturaleza, así que si ustedes son de comer poco picante, mejor advertir antes de que la orden ingrese a cocina.

Los platos fueron saliendo de a dos y en total debe haber demorado un promedio de 35 minutos hasta que salió el último plato, así que no tardan demasiado en sacar los pedidos.

Entre los platos que más picaban, estaba el Som Tam que es la Ensalada de Papaya verde. Nuestra amiga nos dijo que para reconocer que este plato estaba bien preparado, debíamos de sentir la fusión del dulce de la papaya con el picante, y así fue como lo sentimos. De las 7 personas que estábamos en la mesa, fui la única a quien le gustó así que me lo comí todo. Otro plato que era picante fue el Peek Gai Tod (alitas fritas), felizmente pedimos mitad/mitad, cosa que los que querían picante elegían esa opción y los otros, la otra opción. El Pad Thai me pareció muy rico, y lo bueno es que el picante te viene separado, por si deseas mezclarlo. A mí personalmente me encanta los fideos de arroz, así que para mi, este plato fue uno de los mejores, junto con la Ensalada de Papaya.

En cuanto a las bebidas, si ustedes son de tolerar las cosas muy dulces con comida salada, entonces puede ordenar la jarra de Té Tailandés con Leche, sino de lo contrario pueden pedir Té helado o Limonada con Hierba Buena. A mi me gustó el Té Tailandés con Leche, inclusive ya lo había probado ya que esta amiga hace unos años nos mandó a mi hermano y a mi una encomienda con varios snacks de allá, y entre ellos nos mandó una bolsa de té tailandés con leche instantáneo. El sabor era exactamente el mismo (a veces por ser instantáneo se pierde un poco el sabor original, pero en este caso no).

Ahora, haciendo un ranking de precios, calidad y servicio, se podría decir que:

Calidad:

Servicio:

Precio:

El precio promedio de los platos es de S/. 25.00. Si deseas conocer que otros platos puedes encontrar en Ají 555, ingresa al siguiente enlace.
Ese día se gastó un aproximado de S/. 222.00 entre 7 personas (incluyendo las bebidas).

En sí, todos los platos estuvieron buenos y si me preguntan si deseo volver, voy a responder siempre que sí porque todavía me quedan muchos platos tradicionales por probar (el único tradicional que comí fue el Som Tam y el Pad Thai, el resto son muy parecidos a platos de otros países asiáticos). Mi mamá comenta que a ella no le gustó ya que siente que los platos son pequeños, pero personalmente pienso que son tamaño regular (ella es la típica comensal que compara cantidad con precio).

Desde mi humilde opinión les digo que si están cansados de comer siempre la misma comida asiática y quieren algo diferente, no duden en darse una vuelta por Ají 555. No se van a arrepentir.

-Buen provecho-