Hace una semana se llevó a cabo la 5ta Edición de uno de los eventos más grandes de Vivanda: Destinos al Sabor.
Para aquellos que no conocen sobre este evento, Destinos al Sabor es un evento que consta de 2 días, en donde más de 60 bodegas de vinos y licores se presentan para que los comensales puedan probarlos de manera gratuita (incluido en el precio) y si es de su agrado, comprarlo con descuentos especiales (por lo general, Vivanda te da la oportunidad de poder comprar licores con 40% de descuento, y si se paga con tarjeta Diners, te devuelven el 20%).
Al igual que todos los años, el primer día del evento (viernes) inició a las 6:00 p.m. y terminó a las 12:00 a.m. y el segundo día (sábado) inició a las 4:00 p.m. y también terminó a las 12:00 a.m. A diferencia de los demás años, este año también abrieron el día domingo, pero sólo para venta de licores.
La mecánica del evento es la siguiente: a cada persona se le entrega una copa de cristal con una cartonera de pequeños tickets. En él, te permite degustar 18 vinos y 12 licores, sin embargo había algunos tragos que “costaban” 2 tickets o 3, lo que hacía que la cantidad a degustar disminuyera.
Este año, para empezar, quise tomar un buen Chilcano de Maracuyá, y una de mis marcas favoritas en este evento es Ocucaje. No sé si le caí muy bien al bartender pero me dio la bebida gratis (no cobró tickets) e inclusive, me sirvió copa llena. Creo que en parte, el destino quiso ayudarme ya que el año pasado no logré probar Ocucaje porque el bartender de esa vez estaba más atento a otras cosas.
El segundo trago que tomé fue también uno de mis favoritos, el Gin, sin embargo este año quise probar otra marca y fui al stand de Tanqueray. En este stand sí me cobraron 2 tickets y me sirvieron copa casi llena. Luego, fui a darle el alcance a mis amigas, quienes estaban pidieron Aperol. El año pasado lo probé y no me gustó mucho, por eso este año no fui. Mientras las esperaba, vi el stand de Baileys y pensé que terminando mi Gin iría por una copa de Baileys.
No demoré mucho en terminar mi copa y fui por el Baileys, no recuerdo si me cobraron 2 o 3 tickets, pero lo que me sirvieron de Baileys Espresso era una nada. En menos de 5 minutos ya me lo había terminado, así que acompañé a unos amigos a elegir que trago iban a tomar ahora. Ellos fueron al stand de Olmeca, una marca de tequila que nos sirvió (yo también me animé) un cocktail con jugo de toronja. Estuvo muy bueno y felizmente no se me subió rápido.
Como llegamos un toque tarde al evento, recién alrededor de las 10:35 p.m. conseguimos una mesa para poder dejar nuestras cosas. Mientras tomaba mi copa con cocktail de tequila, una anfitriona del evento se acercó para comentarnos que por regulación del distrito, solo venderían trago hasta las 11:00 p.m. (como hacen muchos lugares). Me sorprendió mucho por normalmente no hacen eso, y siempre venden hasta que el evento acaba (más de las 12:00 a.m.) pero este año las cosas cambiaron.
Como todavía quedaba una hora para terminar el evento, quise cerrarlo con un chilcano más, pero quería probar otra marca, así que aposté por Cuatro Gallos. Si bien me habían hablado muy bien de su Chilcano de Mango, lamentablemente cuando llegué ya estaba agotado y sólo quedaba Chilcano de Arándano, el cual estuvo espectacular. Ese fue mi «último» trago de la noche (sin contar el que me tomé cuando terminó el evento, y uno de los stand de vino se habían ido y habían dejado 2 botellas medias llenas).
Como sabrán todos aquellos que me siguen en mi cuenta en Instagram, luego de que terminó el evento, me fui a Gloton’s a cerrar mi gran viernes. Me pedí una Hamburguesa Royal que no terminé porque era un montón, pero estaba buenaza y cayó precisa.
¡Espero poder asistir a la próxima edición de Destinos al Sabor de Vivanda, y disfrutar de los mejores vinos, licores y espumantes!